19 septiembre 2009

Fortaleza de los medios alternativos


No en vano le dicen a Fortaleza “tierra de luz”, porque la intensidad del sol a lo largo del año hace brillar sus costas como un cristal de fuego. La quinta ciudad más poblada de Brasil en el extremo noreste del país -a 3.140 kilómetros de Sao Paulo- es un destino turístico interno e internacional. Una segunda invasión portuguesa se ha apropiado de hoteles de lujo, playas y casas de verano en toda la costa, con una arrogancia que los cearenses rechazan.  En la capital de Ceará aterrizan vuelos directos desde Lisboa, pero no desde ciudades latinoamericanas.

El nombre de la ciudad no es del todo merecido, pues el Fuerte de Schoonemborch que fundaron los holandeses en 1649 es poca cosa y hoy todavía, con el nombre de Nossa Señora da Assunção, no es más que un recinto militar frente al Mercado Central.

Mi visita a Fortaleza a fines de agosto tenía que ver con motivos ajenos al descanso vacacional, aunque no pude resistirme al forró y al baiao de dois (la música y el plato típico, respectivamente), además de suculentos camarones recién sacados del mar.

Colegas de la Universidad de Fortaleza (UNIFOR) –Olga Guedes Bailey, Erotilde Honorio Silva y Valquiria Passos Kneipp, me invitaron al VII Encontro Nacional de História da Mídia, que reunió a  centenares de investigadores de la comunicación de Brasil.


Fui el único participante internacional y tuve la responsabilidad de cerrar el evento con la ponencia “Perspectivas del periodismo impreso alternativo”. Allí mencioné algunas experiencias bolivianas, como las radios mineras, el semanario “Aquí”, la página de Bolpress, el grupo Mujeres Creando y Nueva Crónica. 

Entre los participantes estaba el infaltable José Marques de Mello, uno de los autores incluidos en la Antología de Comunicación para el Cambio Social, gestor de mil y una iniciativas de comunicación en el campo académico brasileño y latinoamericano. La revista Chasqui, de CIESPAL, le dedicó hace poco uno de sus números.

José aparece siempre en los congresos con uno o dos libros nuevos, por lo que su producción intelectual suma casi medio centenar de libros. Ahora que estuve con él, me ofreció un ejemplar del más reciente.

Por séptima vez se reunió la RedAlcar que agrupa a los departamentos de comunicación de decenas de universidades de todo Brasil. Esta red que fundó José Marques de Melo –como tantas otras cosas que ha logrado su espíritu fundacional- reunió durante tres días a profesores y alumnos miembros de diez Grupos de Trabajo que incluyen todo tipo de temas afines a los estudios sobre comunicación e información, sin olvidar los medios alternativos.  En total, 240 ponencias se presentaron en los grupos temáticos, además de los 21 trabajos presentados en 7 paneles durante las plenarias.

Fue una nueva ocasión para constatar que los estudios de comunicación  gozan de excelente salud en Brasil y de establecer nuevos vínculos.